Limpieza, alimentación, protección solar e hidratación son las CLAVES de una piel sana.
Los cuatro fantásticos
Limpieza a fondo:
Es el primer y el más importante de cualquier rutina de belleza. Además de usar tu jabón facial es fundamental que termines aplicando un tónico (mejor sin alcohol),esto te ayudará a eliminar restos de maquillaje, minimizan los poros, no resecan y no generan grasa.
Una dieta equilibrada:
Tomar a diario alimentos ricos en fibra, proteínas y calcio es prioritario para lucir una piel perfecta, aunque está demostrado que , en ocasiones, es necesario un aporte extra de vitaminas. Aquí tiene un papel fundamental la nutricósmetica como complemento a una dieta o a un tratamiento facial, nunca como sustituto de la comida.
Protégete del Sol:
Usar protector solar todos los días es al clave para ganar la batalla al envejecimiento prematuro de la piel, que se hace visible en forma de manchas y arrugas. Para estar perfectamente protegida en la playa hay que repetir la aplicación de la crema cada dos horas y después de cada baño. En la ciudad extiéndela siempre bajo la base de maquillaje.
Hidratación sin parar
Nutrir la piel mañana y noche es un must. Para cutis secos conviene optar por cremas con activos hidratantes, que aporten un extra de nutrición. A las pieles mixtas les va bien texturas ligeras, ya que no generan grasa y además refrescan.